CEUTA ¿INDIGNA O INDIGNADA?

Hay una cita de John Donne que inspiró a Ernest Hemingway a escribir su novela más conocida y dice así; Nadie es una isla, completo en sí mismo; cada hombre es un pedazo del continente, una parte de la tierra; si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia; la muerte de cualquier hombre me disminuye, porque estoy ligado a la humanidad; y por consiguiente, nunca hagas preguntar por quién doblan las campanas; doblan por ti.

No sólo está muerta la persona cuyo corazón ha dejado de latir. Sumergido en indiferencia, también dejas de existir. Es complicado entender que la revolución individual es la antesala del cambio colectivo, pero es la gran excusa de los que creemos que un granito de arena forma montañas. No es posible vivir de la desidia, de la permanente comodidad, que por supuesto no me asegura la comodidad del que tengo en frente. Ceuta es una ciudad cómoda, pero no sólo esto, también acomodada a la poca empatía de sus habitantes, se vive sin implicación, ahora me pregunto si se trata de un cierto desencanto, afirmaba Michi Panero que para estar desencantado hay que haber estado antes encantado. Dejemos de comportarnos como meros espectadores, en toda España los desencantados han salido a la calle, han mostrado su desacuerdo de forma no violenta, han cantado juntos, han compartido comida y sueño, incluso sueños, en las numerosas plazas, mientras aquí nos hemos dedicado a cambiar de canal.

Sin duda, creo que es el momento de mostrar todos nuestros desencantos, darnos cuenta que no es hora de luchar en contra del sistema, sino de gritar con toda fuerza posible que el sistema está en nuestra contra. El sábado 11 de Junio, día en el que toma posesión la nueva Corporación de la Asamblea, se programa una concentración organizada por el 15Mceutí con un claro lema ¿Indigno o Indignado? Nosotros ya hemos elegido ¿Y tú?

¿Qué reivindica este Movimiento? La participación efectiva del pueblo, una escucha activa por parte de los que mandan, pues es la única forma de avanzar hacia una sociedad más justa e igualitaria, que ofrezca oportunidades reales a la ciudadanía. Partiendo de este leitmotiv, se genera un consenso de mínimos adscrito al Movimiento 15M de forma nacional:

1. Reforma de la ley electoral. El sistema actual fomenta el bipartidismo y la alternancia en el poder mediante un reparto no proporcional de este. Demandan una ley electoral que garantice la equidad del voto, independientemente de la opción política y región en la cual se vote.

2. Democracia participativa. La democracia no debe consistir en conceder autoridad plena durante una legislatura. La ciudadanía debe poder tomar parte en la toma de decisiones que afecten de manera trascendente a su futuro.

3. Intolerancia a la corrupción y transparencia gubernamental. Afirman que la corrupción ejercida por los miembros de los partidos políticos alcanza un nivel intolerable. Por ello demandan una mayor transparencia en los partidos y las instituciones públicas, así como garantías de una separación fundamental entre los poderes del Estado.

Yo desde este espacio público me declaro indignado y acudiré a esta convocatoria no sólo por mí, sino por todo aquel que se sienta tan en desacuerdo como yo, pero que su comodidad, indiferencia o llámese como quiera, le impida asistir. En esta ocasión no me quedaré de brazos cruzados, asumiré mi papel de indignado y reivindicaré todo aquello que creo que me pertenece, si no lo hiciera estaría asumiendo que soy un indigno, y verdaderamente siento que las campanas, también doblan por mí.