lunes, enero 30, 2012

EL MÉTODO GRÖNHOLM RESULTÓ EFECTIVO: DIVIRTIÓ Y ARAÑÓ LA CONCIENCIA


Cecida por Enrique Serra Zamora

          Llueve. Otra vez la lluvia se apodera del estreno de La Compañía de César Martín, y en esta ciudad, donde el uso de paraguas aumenta las ganas de cobijarse entre mantas, propiciaron que algunas butacas quedaran vacías, habiéndose vendido la casi totalidad de las entradas. Una lástima si se tiene en cuenta que la creatividad compareció desde el inicio con un original sketch que recordaba una serie de normas que el público debiera cumplir una vez que acude al teatro, y que tristemente aún no sabe cómo hacerlo. Pero, incluso en estas lides el Método Grönholm resultó efectivo.
 En ocasiones, la creatividad no tiene que ir acompañada de calidad, sin embargo este no fue el caso, el monótono texto de Jordi Galcerán había sufrido una sorprendente vuelta de tuerca, un claro ejemplo de adaptación inteligente, aportando un mayor ritmo dramático y sobre todo, el humor como recurso necesario para relajar la crítica mordaz de una situación que refleja una deshumanización inquietante. ¿Quién no ha temblado en una entrevista de trabajo? El método camina entre la deshonrosa pérdida de identidad para conseguir un buen puesto laboral y las licencias, eventualmente ilícitas, que se toman algunas empresas a la hora de buscar un profesional competente. No obstante,  ¿Quién, en estos tiempos de crisis, no daría lo que fuera por temblar en alguna entrevista? 
Cedida por Dani Vicente
            Podría incidir de forma positiva en las numerosas modificaciones realizas por el director, pero entonces, no recalaría en otros aspectos que me interesan destacar, como por ejemplo; la falta de originalidad en la escenografía, evidentemente era una copia del ventanal de la película homónima de Marcelo Piñeyro, estaría muy bien que todas las compañías de Ceuta se empezaran a apoyar en profesionales para el diseño de la escena, y así darían la oportunidad a ceutíes preparados. Otro asunto a destacar es la incorporación a la compañía, de Miriam RoA y Sandra Marcos. Ambas deleitaron con un trabajo de calidad, y sus personajes, bien formulados, conquistaron a los asistentes. Miriam consiguió romper la respetada cuarta pared, tras una escena en la que tenía que defender, de forma imposible, la necesidad de un torero para la sociedad, el público entregado rompió a aplaudir sintiéndose parte de la representación, resultó ser el instante de oro buscado por cualquier amante del teatro. Pero si alguien destacó con una interpretación muy verosímil fue Sandra Marcos, apareció sobre las tablas cargada de carácter y sensualidad, sus tacones despertaban una cierta excitación que aumentaban a cada golpe de ironía, además de añadir una actitud altamente competitiva, y una modulación de voz perfecta.  
En cambio, la recreación del personaje de Cristina Mhidal puede que no fuera el correcto, el marcado acento andaluz y la rapidez verbal que caracterizaba la personalidad de Raquel hizo que se perdiera parte del texto, aún así aportó instantes de verdadera comicidad. La misma comicidad que le hubiera restado al personaje de César Martín -Fernando-, para que hubiera recalado en un hijoputismo mucho más profundo, como es característico en el teatro social, que resulta tan necesario y que en muy pocas ocasiones se nos ofrece con la intención de divertir y de arañar la conciencia del público.

domingo, enero 22, 2012

CUALQUIERA PUEDE SER EL ASESINO, INCLUSO UNA VISITA INESPERADA

(Cedida por Santiago Vicente)
ConMedia Farsa ha vuelto a elegir a Agatha Christie para seducir al público ceutí, el suspense es un buen reclamo para que la asistencia sea extraordinaria, hasta tal punto que se haya tenido que colgar el cartel de completo, una de las máximas aspiraciones de cualquier compañía local, y un tremendo regalo el poder sentirse aplaudidos por un teatro donde no quedaba ni una sola butaca libre para una visita inesperada.
Quien conozca las numerosas adaptaciones teatrales de la reina del crimen, se dará cuenta que la representada en el Teatro del Revellín es una obra poco resuelta, desde el inicio, la presencia de un muerto -Richard Warwick-  y una supuesta asesina -Laura Warwick-, la trama va avanzando a través de excesivos diálogos que en muchas ocasiones, sobre todo en el primer acto, amilanan el ritmo dramático, no obstante resultan imprescindibles para mostrar la personalidad del muerto y para reconstruir los indicios por los que cada uno de los involucrados pudieran ser el asesino. Es fácil determinar que la profundidad de los personajes es mínima, lo que en dramaturgia se denomina personajes tipos, sus rasgos definitorios son expuestos de forma leve pero rápidamente reconocibles, sin embargo estas circunstancias impiden empatizar con ellos. Sin ser la mejor obra de Agatha Christie, ConMedia Farsa ha sabido aportarle el encanto necesario para que el público disfrutara del misterio deseado, y un elenco de actores aficionados que disfrutaron interpretando a sus personajes, y se desenvolvieron en su mayoría con soltura, sobre todo Christian Marfil -Jan Warwick-  interpretando a un discapacitado intelectual fácilmente manipulable, a quien el actor aportó numerosos detalles, alejándolo completamente de ciertas excentricidades que hubieran podido confundirlo con el gracioso de nuestro Siglo de Oro.
Cuando adaptas una obra corres el riesgo de no mejorar lo que han realizado otros directores, pero ¿qué sería del arte sin el atrevimiento? José Antonio García, director de ConMedia Farsa, ha decidido no actualizar la acción, y resulta muy acertado si se tiene en cuenta que cualquier modificación desestabilizaría la verosimilitud del suspense. Otro asunto es la eliminación de las aportaciones cómicas del agente Cadwallader, supongo, en busca de una representación menos espesa, y en esto sí muestro mis dudas, porque Agatha es una maestra en la mezcla del misterio y el humor, aunque tampoco estoy seguro de que pudiéramos participar de la comicidad inglesa. Eso sí, el punto débil de la compañía fue un vestuario poco atinado y una caracterización que anticipaba las fiestas paganas de febrero, dicha elección no aportaba mucha sinceridad a la escena, y no creo que en la actualización de la estética hubiera estado la solución, pero en esto consiste el riesgo, a veces se acierta y otras no. Muchas gracias por arriesgar y seguir haciéndolo en las próximas representaciones, que espero con éxito de asistencia, ahora que el público ceutí ha decidido apoyar el teatro aportado por las compañías locales.